Extraños y fuertes destellos de lo que era un agujero negro consumiendo una gran estrella y escupiendo partes de esta fue lo que pudieron observar un grupo de astrónomos a través de las imágenes proporcionadas por un satélite, según un estudio publicado por la revista Monthly Notices de la Sociedad Astronómica Real.
Fue en el mes de junio del año pasado que en el sistema binario V404 Cygni un inmenso agujero negro y una estrella que orbita cerca de él, un poco más pequeña que el sol de nuestro sistema solar, fueron los responsables de una dramática actividad que por dos semanas fue brillante y duradera y que dejó a los científicos sorprendidos.
Que ocurría en esta orbita
Durante esas dos semanas donde era más brillante esta actividad se pudieron observar unos destellos de luz rojos los cuales tardaban unas cuantas fracciones de segundo, dichos destellos eran visibles mientras el agujero negro se alimentaba de la estrella que tenía a la par, la asombrosa imagen que combinaba al agujero negro, la estrella siendo absorbida y los destellos rojos saliendo disparados se ha convertido en la imagen del momento.
El espectáculo pudo observarse gracias al satélite de la NASA llamado “Swift”, satélite que también pudo detectar una fuerte corriente de rayos X de alta energía, provenientes de una constelación llamada Cygnus que se encuentra a ocho mil años luz de nuestro planeta.
Con la ayuda de una cámara de imagen rápida (ULTRACAM) se pudo documentar estos sorprendentes destellos provenientes del agujero negro, los cuales tenían aproximadamente una potencia equivalente a 1,000 soles y algunos de ellos eran tan veloces que podían ser 10 veces más rápidos que un parpadeo.
Un grupo de científicos de diferentes partes del mundo como Emiratos Árabes, Estados Unidos, India y Europa, dirigidos por la prestigiosa Universidad Inglesa de Southampton, fueron quienes informaron que estos destellos rojos procedían de la estrella y que estos correspondían a materiales que no habían sido consumidos por el agujero y fueron escupidos al espacio.
Según el equipo de científicos los destellos de color rojo son parte de materia en movimiento rápido, para ellos esto era un fenómeno difícil de observar además de interesante ya que un agujero negro es tan denso que ni aun la luz es capaz de poder escapar de la gravedad. “La alta velocidad nos indica que la parte del agujero negro donde los destellos están siendo provocados es una parte muy compacta” deduce el director del estudio realizado por la universidad.
La rareza de este agujero negro
Regularmente los agujeros negros se van formando de partes de alguna estrella ya moribunda que ha pasado la explosión supernova y logran acumular mucha materia comprimida en una zona relativamente pequeña. En el caso de este extraño fenómeno astrológico pudieron también los científicos darse cuenta que los destellos de luz roja llegaban a ser más intensos en la parte más alta de alimentación del agujero.
Los científicos astrónomos deducen que este agujero negro cuando se iba alimentando de forma tan rápida de la estrella que tenía a la par, producía tanta fuerza que comenzó a reaccionar de una manera muy violenta llegando a tirar partes del material de esta como si fuera un chorro rápido, el tiempo que duran estas actividades puede estar relacionado con la magnitud de ese chorro que fue visto detalladamente por primera vez en la historia.
Son tan raras y difíciles de encontrar estas explosiones en un agujero negro que a cualquier científico pueden tomar por sorpresa debido a la rareza del evento; la última vez que el sistema binario V404 Cygni realizó una erupción fue en el año 1989 y de hecho muchos astrónomos ni siquiera habían presenciado una.
Normalmente estos estallidos son bastante tenues pero los destellos observados en esta ocasión en Cygni fueron de los estallidos más fuertes que han podido ser observados por astrónomos durante los últimos años.
Gracias a este raro acontecimiento ocurrido el año pasado, se ha motivado a muchos científicos astrónomos para que se coordinen esfuerzos a nivel mundial para que puedan ser observadas futuras explosiones y se estudien más a fondo las actividades que ocurren dentro de los agujeros negros.