▷ 9 Curiosos Planes de Hitler si hubiera Ganado la Guerra

Adolf Hitler entró en una guerra muy complicada para Alemania. Un conflicto mundial con tantos países al mismo tiempo se puede pensar como una locura. Sin embargo, la Alemania nazi estaba muy preparada para la guerra en ese momento. La maquinaria de guerra que tenía estaba muy por encima de las demás potencias, y de hecho pudo haber ganado la guerra si hubiera hecho las cosas de otra manera. Hitler realmente pensaba que saldría triunfador. Los planes de Hitler para después de la guerra ya estaban escritos.

Si Alemania hubiera ganado la segunda guerra mundial el mundo sería muy diferente a como lo conocemos. Serían tantas las cosas que hubieran cambiado que necesitaríamos docenas de artículos para contarlo. Sin embargo, algunos de los planes de Hitler eran más curiosos que otros. Te contamos algunos que te dejarán con la boca abierta.

1 – Un espejo gigante en el espacio

Uno de los planes de los nazis era poner un gigantesco espejo en el espacio. La idea era que tuviera un kilómetro y medio de diámetro y que orbitara la Tierra a unos 36 mil kilómetros de altura. La idea era usarlo como un arma contra cualquier país que se rebelara a su mandato.

El plan se era muy simple y lo podemos imaginar como una gran lupa quemando hormigas con los rayos del sol amplificados. Sin embargo, en este caso las hormigas eran personas en ciudades. Los rayos de sol magnificados por el espejo achicharrarían cual acto de rebeldía en cualquier lugar del planeta.

Junto al proyecto del espejo, los nazis tenían pensado poner una gran estación espacial en órbita. Desde esta estación un grupo de astronautas controlarían el enorme espejo, ¿Hubiera funcionado una cosa como esta? Mucha gente lo duda, pero el científico Hermann Oberth que dirigía el proyecto pensaba que si era viable.

Cuando la guerra acabó, Hermann Oberth trabajó con los Estados Unidos en otros proyectos. Quiso convencer a los americanos para que construyeran el espejo en el espacio, pero al final no lo aprobaron. Si Alemania hubiera ganado la guerra el proyecto hubiera seguido adelante sin ninguna duda.

2 – Devolver la tierra a los americanos nativos

Los nazis son considerados racistas por muchas de las acciones que hicieron durante la guerra. Sin embargo, tenían algunas excepciones que sorprende a mucha gente. Cuando se trataba de los nativos americanos los nazis aceptaban esta cultura sin fisuras. De hecho, antes de la guerra los nazis habían hecho alianzas con los indios americanos.

La Federación de Indios Americanos se ganó la simpatía del movimiento nacional socialista. Algunos de los indios de esta organización se convirtieron en la voz de los nazis en Estados Unidos. Uno de ellos fue Elwood A. Towner, apodado con el nombre indio de Jefe Nube Roja. Este indio americano daba sus charlas con la svástica nazi junto a sus ropas indias.

Los nazis por su lado veían a los indios americanos unos aliados, y de hecho les apoyaron con propaganda contra el gobierno americano. Les prometieron que si el gobierno de los Estados Unidos era derrocado, les devolverían todas las tierras de sus ancestros.

No está claro que la Alemania nazi fuera a cumplir su promesa, pero el Jefe Nube Roja si lo creyó. En uno de sus discursos dijo tener un ejército de 750 mil nativos americanos preparados para luchar por Hitler. En el momento que los nazis decidieran invadir Estados Unidos, este ejército estaría a su disposición.

3 – Los planes de Hitler para Asia

La Alemania nazi tenía aliados en otras partes del mundo, y uno de los mayores era Japón. Habían hecho planes para repartirse el poder en el mundo, donde Japón dominaría toda Asia. De hecho, la gran parte de la India sería controlada por los japoneses.

La idea era construir lo que Japón quería llamar “La gran Esfera de Prosperidad Asiática del Este”. El plan era poner en cada uno de los países asiáticos gobiernos que estuvieran al mando de Japón. El objetivo era alejarse del imperialismo de occidente y mantener Asia para los asiáticos. Sin embargo, todo sería bajo las reglas de Japón.

El japonés sería la lengua oficial en toda Asia y todos los colegios enseñarían la cultura japonesa  de forma obligatoria. Curiosamente Australia y Nueva Zelanda también estarían bajo el control japonés. Hitler tenía una opinión sobre esto, ya que temía que si Alemania ganaba la guerra, sería el fin del hombre blanco en estos dos países. Esto no le gustaba demasiado, pero Japón era un aliado después de todo.

4 – El plan contra el imperialismo japonés

Aunque Hitler tenía a Japón como aliado, la idea de que creara un gran imperio en Asia le preocupaba. Si ganaba la guerra se crearían dos grandes imperios: El de Alemania en occidente y el de Japón en el Este. Como los nuevos dueños del mundo solo sería cuestión de tiempo un enfrentamiento.

Por este motivo, otro de los planes de Hitler era poblar de colonos alemanes toda la frontera entre occidente y Asia. El plan era enviar a todo hombre que hubiera servido en el ejército alemán por diez años a la frontera del Este. Se le daría una granja, un arma y tendrían que tener todos los hijos que pudieran.

Una de las reglas era que no podían llevar a sus novias o mujeres alemanas. Tenían que elegir una mujer local de la frontera. De esta manera se crearía una nueva generación de mestizos alemanes bajo la orden nazi. Otra regla era que cada hombre tendría que tener al menos siete hijos.

Con este plan la frontera con el imperio japonés estaría defendida. En caso de conflicto, sería una primera barrera para que las fuerzas japonesas no pudieran avanzar.

5 – Una supuesta guerra entre Estados Unidos y Gran Bretaña

Como se ha dicho, el Jefe Nube Roja decía tener un ejército preparado para apoyar a Hitler si decidía invadir los Estados Unidos. Sin embargo, Hitler dijo públicamente que no tenía intención de hacer esta invasión. De hecho, dijo en una ocasión que sería tan irreal como intentar invadir la Luna.

Adolf Hitler tenía una teoría sobre los Estados Unidos. Antes de que los americanos entraran en la guerra, estaba seguro que el gobierno americano atacaría Gran Bretaña. Estaba convencido que esto pasaría sin importar como acabara la guerra mundial. Dijo en más de una ocasión que era cuestión de tiempo que alguno de los dos países desapareciera (hablando de Inglaterra y Estados Unidos).

6 – Los planes de Hitler para Europa

El primero paso en la guerra de Hitler era conquistar Europa y ponerla bajo el mando alemán. Una de las primeras cosas que haría era hacer una limpieza en Europa del Este. Consideraba la raza eslava de algunos países indeseables, lo haría con un plan llamado Generalplan Ost (Plan General del Este).

El plan de iniciaría una vez que conquistaran la Unión Soviética. Empezarían por eliminar las élites de este país y empezar a establecer la cultura y los valores alemanes. Lo haría haciendo deportaciones masivas de eslavos a Siberia para ser usados en campos de trabajo.

De la misma manera que se quería poblar la frontera con Asia, se enviarían millones de alemanes a los países del Este para que tuvieran todos los hijos posibles. Según el plan Generalplan Ost, en unas pocas décadas toda Europa tendría genes alemanes de forma predominante.

7 – Hitler no apreciaba nada a Gandhi

Antes de que la segunda guerra mundial comenzara, Hitler le dio un consejo al ministro de extranjería británico. Le dijo “pégale un tiro a Gandhi”. También le dijo que si eso no era suficiente para parar las protestas, que matara una docena de los líderes mas cercanos a Gandhi.

Hitler pensaba que el gobierno británico estaba siendo demasiado blando con las protestas de Mahatma Gandhi. Veía a los indios como seres inferiores que tenían que estar bajo el control de la raza aria. De hecho, tenía planes para la India en caso de ganar la guerra.

Curiosamente Hitler tuvo buenas oportunidades de hacerse con el control de la India. Una de las más importantes fue cuando el líder indio de la resistencia armada Subhas Chandra Bose fue a Berlín. Ofreció a Hitler liderar una revuelta en India contra los británicos.

Había miles de personas que estarían dispuestos a luchar si Hitler les apoyaba con su ejército, armas y otros recursos. Sin embargo, Hitler pensó que no merecía la pena luchar por una raza que consideraba inferior. Finalmente Subhas Chandra Bose se alió con los japoneses para el plan “La gran Esfera de Prosperidad Asiática del Este” comentado antes.

8 – Los musulmanes controlarían Oriente Medio

Otra cosa curiosa de Hitler era que veía con buenos ojos la religión musulmana. Es algo extraño teniendo en cuenta sus ideales sobre la raza aria. Al principio de la guerra Hitler le prometió a Mussolini que Italia dominaría Oriente Medio.

Sin embargo, durante el transcurso de la guerra las cosas cambiaron. Se puso en contacto con un importante líder musulmán en Jerusalén llamado Haj Amin al-Husseini. Le dijo que tenían los mismos enemigos, que eran los ingleses, los judíos y los comunistas. Al-Husseini quería empezar una revuelta contra los ingleses y dio todo su apoyo a Hitler en esta parte del mundo.

Sin embargo, Hitler le dijo que esperara hasta que la guerra con la USSR acabara. Aun así, Hitler ya tenía planes para enviar soldados y armamento a Oriente Medio y luchar junto a Al-Husseini.

Cuando la Alemania Nazi estaba perdiendo la guerra se arrepintió de no haber hecho más alianzas con los musulmanes. Esto era más evidente al perder a Italia como aliado. La idea que tenía era que los musulmanes de Al-Husseini controlaran todo Oriente Medio junto a la Alemania nazi. Sería un segundo imperio controlado por los alemanes aparte de Europa.

Esto hubiera hecho a Hitler más poderoso aun teniendo en cuenta todos los recursos de Oriente Medio. Solo el imperio asiático de Japón le podría poner en apuros. Ni siquiera Estados Unidos tendría capacidad de enfrentarse al tercer Reich en Europa u Oriente Medio.

9 – La admiración por los testigos de Jehová

Aunque Hitler tenía buenas relaciones con el mundo del Islam, eso no significaba que quería tenerla en Europa. Quería cada cosa en su lugar correspondiente, y el Islam era incompatible con la cultura occidental.

Heinrich Himmler era uno de los máximos oficiales de Hitler y tenía un gran respeto por los testigos de Jehová. Eso no significa que miles de ellos fueran mandados a campos de concentración.

Himmler dijo una vez “si el fanatismo de los testigos de Jehová pudiera ser controlado por Alemania, seríamos más fuertes de los que somos ahora”. Pensaba que esa religión era la combinación perfecta de fanatismo y pacifismo, lo cual les hacía trabajar duro y les hacía fácilmente controlables sin usar la violencia.

Por este motivo Heinrich Himmler ideó un plan para que la religión de los testigos de Jehová fuera promocionada en Europa. Eso no significa que seguirían habiendo países cristianos, pero los testigos de Jehová hubieran sido la segunda religión más importante bajo el mandato nazi.