Cuando pensamos en un asesino nos suele venir a la cabeza una persona solitaria con un arma acechando a su víctima. Sin embargo, diferentes grupo en la historia han reclutado en sus vidas suficientes asesinos para poder llamarse organizaciones. Los ha habido de diferente tipo y motivados por diferentes cosas, pero al final estas peligrosas organizaciones se han hecho un hueco en la historia. Veremos algunas de las más conocidas y mortíferas a continuación.
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Los Werwolf en Alemania
El grupo de los Werwolf tenía unos cinco mil miembros que habían sido seleccionados de las juventudes hitlerianas. Los entrenaron para realizar sabotajes y cometer silenciosos asesinatos si hacía falta. Los utilizaron sobre todo para estar en las zonas que habían sido ocupadas por los aliados. En secreto ponían todas las trabas que podían a los aliados y quitaban de en medio a quien podía ir contra los intereses del partido Nazi. Dentro de los Werwolf había también varios grupos liderados por diferentes oficiales alemanes.
En la primavera de 1945 los aliados detectaron a estos grupos de asesinos y saboteadores e hicieron una limpieza. Esto ocurrió después de unos de los asesinatos más conocidos fue el del alcalde de Aachen. Un pequeño grupo de Werwolf se disfrazó y se pudieron acercar lo suficiente al alcalde para abatirle.
La sociedad de Sarasota
En un principio los Sarasota fueron una agrupación política que hacían tareas de vigilancia. Corría el año 1884 en Nueva York cuando este grupo fue fundando. Sin embargo, en poco tiempo los diarios de Nueva York les pusieron el nombre de la sociedad asesina de Sarasota. Esto fue debido a su implicación en dos muertes. El problema era que el grupo lo componían gente del norte y del sur, con las consiguientes disputas por su ideología. Al final estas discusiones llegaron a más y se produjeron dos muertes. El juicio que hubo después contra más de once miembros de la organización, llevó finalmente a su desaparición.
Las Vishkanyas
Este grupo lo componían bellas mujeres que también eran mortíferas. Existieron en la antigua India hace muchos años y la idea era que finalizaran conflictos entre reyes sin una aparente violencia. Según algunos escritos antiguos, a estas asesinas les cepillaban el pelo con un poco de veneno cada vez. Al cabo del tiempo desarrollaban una inmunidad al veneno. Luego eran enviadas al campamento enemigo o un rey rival para envenenarlo. Al comer y beber la misma comida, no levantaban sospechas.
En otros casos se podía impregnar a la joven con veneno para que envenenara al rival al mantener relaciones íntimas. En otros casos se podía contagiar a la asesina con una enfermedad infecciosa para su propagación en tierra enemiga.
La Mano Negra
Puede que sea la organización asesina que más se conoce. La Mano Negra se formó en Serbia en 1911 y realizaron actividades violentas con el objetivo de tener una Serbia unida. Enviaron asesinos para matar al emperador Franz Josef y también al gobernador Bosnia-Herzegovina de ese momento. Ambos intentos fracasaron, pero el número de miembros de la Mano Negra subió bastante. Uno de los asesinatos más celebres que hicieron fue el del archiduque Franz Ferdinand. Para no fallar, enviaron a tres asesinos por si alguno fallaba tener una alternativa. Esta vez sí tuvieron éxito.
Los Sicarii
Los Sicarii eran asesinos judíos que se llamaban de esta manera por el tipo de daga curvada que llevaban llamado sica. También eran muy conocidos por sus técnicas de asalto, aunque la mayoría de las veces el sistema era seguir a sus víctimas entre la gente hasta el momento que pudieran atacar. La daga iba oculta en sus ropajes y era sacada solo en el momento de cometer el crimen. Su objetivo eran los romanos y también incitaron a muchas revueltas contra ellos.
Su desaparición como organización empezó después de su fallido intento de rebelión en Jerusalén contra los romanos. Se tomaron muchas medidas para acabar con el grupo y finalmente tuvieron que disolverse.
Murder Inc.
En los años treinta y cuarenta los Estados Unidos pasaron por un periodo de violencia debido al crimen organizado. Una ramificación del sindicato del crimen fue Murder Inc. Los cuales cometieron unos mil asesinatos que se sepa. Sus oficinas centrales estaban localizadas en una tienda abierta las 24 horas. En la tienda tenían varias líneas telefónicas desde donde daban instrucciones de los siguientes asesinatos en la lista. Muchas de los crímenes se cometieron en la costa este, y la mayoría eran miembros de la mafia caídos en desgracia. Se da la circunstancia de que la mayoría de los asesinatos se cometieron con un picahielos.
El jefe de este grupo criminal fue Louis Buchalter fue detenido por traficar con drogas. Estando en la cárcel fue condenado a la silla eléctrica y hubo mucha polémica por este motivo. Se habla de conspiraciones para quitarle de en medio debido a todo lo que sabía.
Los Nokmim – cazadores de nazis
Se les da varios nombres a este grupo perseguidor de nazis, y su misión era que ningún nazi no escapara sin castigo. Nokmim en hebreo significa “vengadores”. Era un grupo secreto del que no se sabe mucho. Tampoco se sabe con exactitud cuántos nazis lograron capturar o matar. Uno de los casos más conocidos fue el de un antiguo oficial de la Gestapo que fue al hospital para una operación sin importancia. Murió en el hospital debido a que alguien le había inyectado keroseno en la sangre.
Tampoco se sabe por cuánto tiempo estuvieron en activo. Parece ser que estuvieron más atareados en la década de los cincuenta y tenían alcance mundial. Las fronteras no detenían sus acciones y tampoco se sabe que apoyo tenían de otras organizaciones o países.
Los asesinos de Hassan-Is-Sabbah
Este grupo sectario estuvo en activo durante un siglo y medio hasta que los Mongoles les hicieron desaparecer en 1256. Hassan-Is-Sabbah fue el fundador del grupo y su filosofía era que no era justo que los líderes vivieran una vida de lujo mientras su pueblo pasaba hambre. Los miembros del grupo eran entrenados para acabar con altos mandatarios o militares corruptos con mucho poder. Se sabe que el primer asesinato que cometieron fue en 1092, aunque el grupo prefería verlo como ejecuciones justas en lugar de asesinatos.
Tenían un gran número de miembros y sus acciones se extendían por multitud de localidades. También tenían su propia lengua para hablar entre ellos.