Ya son unos cuantos años los que han pasado desde que apareció la serie La Casa de la Pradera. Eran los tiempos cuando otra serie igualmente famosa llamada “Bonanza” había acabado, y Michael Landon buscaba comenzar un nuevo proyecto. Mientras buscaba lo que sería su nuevo trabajo en televisión, la cadena NBC le llamó para ofrecerle algo que tenían en mente. Era llevar a televisión una serie de libros escritos por Laura Ingalls Wilder llamada La Casa de la Pradera.
El proyecto inicialmente sería hacer una película para la televisión, pero nadie había hablado de series. Michael Landon se interesó por el proyecto y lo hicieron. La película tuvo un gran éxito y de pronto la NBS se vio saturada por peticiones de gente preguntando qué le pasó a la familia Ingalls. Esto abrió una oportunidad para hacer que la película se convirtiera en una serie.
La serie La Casa de la Pradera comenzó en 1974 y tuvo un gran éxito que la prolongó hasta 1983. La acción ocurría alrededor del año 1800 en un pequeño pueblo llamado Walnut Grove, en el estado de Minnesota. Hay cosas de la serie que seguro que te sorprenderán después de tantos años.
Indice de Contenidos
- 1 – Los ajustes físicos de Michael Landon
- 2 – La ropa fue un problema por las temperaturas
- 3 – El alcohol estaba muy presente en el rodaje
- 4 – Las escenas de amor de Melissa Gilbert
- 5 – La hija pequeña Carrie realmente eran dos niñas
- 6 – La supuesta maldición de La Casa de la Pradera
- 7 – El actor Sean Penn empezó su carrera en esta serie
1 – Los ajustes físicos de Michael Landon
El actor y productor Michael Landon tuvo mucho que ver con la serie, y estaba a la cabeza del reparto. Sin embargo, había algunas cosas que tuvieron que adaptarse a como era. Para empezar, estando todavía en la serie “Bonanza”, se le había puesto el pelo gris a pesar de ser muy joven. Ya entonces se teñía el pelo de negro con un producto muy específico y lo siguió haciendo rodando La Casa de la Pradera.
Sin embargo, surgió un problema y es que el lugar donde se rodaba la serie llamado Simi Valley, era muy soleado. El intenso sol provocaba que el producto le diera un color extraño a su pelo. Tuvieron que ajustar las luces para hacer las filmaciones y evitar los reflejos en el pelo de Landon. Finalmente el actor tuvo que aceptar dejar el producto de teñirse el pelo y ponerse en manos de profesionales.
Por otro lado, Michael Landon estaba bastante orgulloso de su físico. De hecho, solía aparecer en muchas escenas sin la camisa puesta y solo mostrando unos tirantes. Hacía mucho ejercicio y le gustaba mostrarlo en cámara. De hecho, en la serie cuando resultaba herido según mandaba el guión, nunca se rompía una pierna o un brazo. Siempre era una o dos costillas rotas, lo cual permitía enseñar el torso sin vendajes o escayolas.
2 – La ropa fue un problema por las temperaturas
Como se ha dicho, la serie se rodó en Simi Valley en un enorme rancho de California. El problema era que solía hacer un calor terrible casi a diario. Las actrices tenían que llevar vestidos de la época que las cubría casi por completo, y además hechos con algodón. El rodaje fue un suplicio para muchas de las actrices que no podía aguantar el exagerado calor. Varias personas se desmayaron a lo largo del rodaje, incluyendo al equipo de filmación. La actriz Alison Arngrim que hacía de Nellie Oleson fue una de las que peor lo pasó. Se desmayó el primer día de rodaje de la serie.
Hablando de Nellie Oleson, su personaje siempre llevaba unos bonitos rizos rubios. Lo cierto es que no eran suyos y se tenía que poner una peluca para rodar. Esto le daba más calor aun, por lo que no es extraño que se desmayara el primer día. La peluca era muy pesada, pero eso no era lo peor. Tenía unos artilugios de sujeción que provocaban pequeñas heridas a la actriz. Está claro que no fue fácil para ella.
3 – El alcohol estaba muy presente en el rodaje
Según testimonio de muchos de los actores y actrices de la serie La Casa de la Pradera, el alcohol corría a raudales. Para empezar, se supo después que Michael Landon era un gran bebedor y lo hacía a cualquier hora. Por la mañana antes del rodaje y a lo largo del día. Solía beber vodka en la jarra de café que aparece en la serie. Era sobre todo para que fuera evidente que estaba bebiendo alcohol.
No era el único que bebía en el rodaje. El equipo de filmación solía pedir varias cajas de cerveza que se bebían a lo largo del día. Beber alguna bebida alcohólica en las filmaciones de La Casa de la Pradera estaba normalizado. Algunos de los actores y actrices más jóvenes tuvieron problemas más tarde con el consumo de alcohol y drogas. Melissa Gilbert (Laura Ingalls) fue una de ellas.
4 – Las escenas de amor de Melissa Gilbert
En la serie La Casa de la Pradera, la actriz Melissa Gilbert tenía 15 años aunque se la mostraba como si tuviera 17. Se encontró con un problema durante la filmación ya que los guionistas decidieron que tuviera novio y se casara. El elegido fue el actor Dean Butler, el cual hacía de Almanzo Wilder. El actor tenia 23 años por aquel entonces, y Melissa Gilbert no tenía ninguna experiencia con chicos hasta ese momento.
Las escenas donde se tenía que besar con Butler le fueron muy incómodas. Eso no fue todo, ya que en la serie se acaban casando y tenían que dormir juntos. Esas escenas le resultaban bastante violentas, aunque lo de besarle lo llevaba peor. Finalmente le pidió a Michael Landon que en las escenas románticas no hubiera besos. Se sustituyeron por abrazos y algún que otro pellizco en la mejilla.
La cosa empeoró porque claramente Melissa Gilbert y Almanzo Wilder no tenían química. Esto empezó a preocupar a los productores, que pensaban que se notaría mucho frente a la audiencia. Nunca consiguieron que ambos actores sacaran las “chispas” que los productores buscaban.
5 – La hija pequeña Carrie realmente eran dos niñas
La hija pequeña de los Ingalls llamada Carrie fue protagonizada por dos niñas gemelas, que fueron Rachel y Sidney Bush. Es la niña que se puede ver al empezar la serie y que se cae mientras corre por la pradera. Las gemelas actuaban de manera rotativa cada dos horas, ya que por la ley de menores de California no se permitía que trabajaran ciertas horas seguidas.
Lo cierto es que en los créditos entrantes cuando una de las gemelas se cae en la pradera, fue algo imprevisto. Lo que pasó es que Michael Landon lo encontró algo muy enternecedor y pidió que se quedara en los créditos de inicio en la serie.
6 – La supuesta maldición de La Casa de la Pradera
Se ha hablado mucho de algo que muchos han olvidado sobre La Casa de la Pradera. Varios actores de la serie murieron de cáncer no demasiado tiempo después de finalizar la serie. En total fueron seis los que sucumbieron a la enfermedad y otros consiguieron sobrevivir, como es el caso de Charlotte Stewart.
Michael Landon murió de cáncer de páncreas, y aunque muchos piensan que fue debido a su adicción al alcohol y el tabaco, otros lo asocian a la serie. Otros cinco actores también murieron por esta enfermedad, y se empezó a hablar de una contaminación química y radioactiva que había cerca del rancho donde se rodó la serie.
El motivo es que el laboratorio de Rocketdyn había tenido uno de los peores accidentes nucleares de la historia de Estados Unidos en 1959. La zona se utilizó también como vertederos de residuos nucleares durante años. La gente no tardó en vincular la contaminación química y radioactiva con el cáncer de los actores de la serie. Era algo que ya había pasado antes, como les pasó a John Wayne y otros actores.
7 – El actor Sean Penn empezó su carrera en esta serie
Otra cosa que muchos no saben de La Casa de la Pradera es que el actor y director Sean Penn estuvo en ella. De hecho, le debe su primer papel como actor. Su personaje no tenía relevancia y era más un figurante que un personaje habitual. Solo estuvo en un episodio y tenía 13 años cuando lo rodó. Nadie diría que luego ser haría famoso unos pocos años después.