6 Cosas Embrujadas de la Película Jóvenes y Brujas

Ya han pasado unos cuantos años desde que se estrenó la película Jóvenes y Brujas, donde el cine de brujas volvió a ser muy popular. Se buscó hacer una película de brujería orientada a adolescentes, y el impacto que tuvo en el género fue brutal. Para hacernos una idea, hasta el momento el cine de brujas solía ser bastante parecido. Se tenía una imagen muy concreta de lo que eran las brujas, donde eran mujeres mayores, más bien feas y con una vestimenta determinada. Todo eso sin contar que usaban escobas para volar.

Con Jóvenes y Brujas la cosa cambió y se dio una nueva imagen de las brujas modernas. Lo cierto es que ya había películas que lo habían enfocado de este modo, pero esta fue la que revolucionó el género. Después de 24 años desde que se estrenó, hoy veremos algunas cosas que no sabías de esta pequeña joya del cine de terror.

1 – La actriz Fairuza Balk ya era un poco bruja

El director de Jóvenes y Brujas Andy Fleming era un gran admirador de Fairuza Balk antes de hacer la película. Aparte de esto, también sabía que la actriz estaba metida en temas de paganismo y se interesaba por la brujería. Por este motivo no dudó en llamarla para ser una de las protagonistas de su film. Fue todo un acierto porque Fairuza Balk le ayudó también para muchas escenas del film.

Fairuza Balk ayudó a que los personajes fueran más creíbles. También mejoró algunas de las escenas para darles un toque más “pagano”, gracias a sus conocimientos. Para hacernos una idea de lo involucrada que esta Fairuza Balk en el tema, durante el rodaje compró una tienda de ocultismo.

2 – Se contrató una bruja de verdad como asesora

Aunque Fairuza Balk sabía bastante de brujería y ayudó en Jóvenes y Brujas, contrataron una bruja de verdad como consultora. Los productores querían que todo fuera lo más parecido a la realidad posible, por lo que contrataron a Pat Devin. Esta asesora es miembro de una de las organizaciones religiosas paganas de Estados Unidos. Se llama “El Pacto de la Diosa” y es un grupo Wiccano dedicados a la brujería.

Devin ayudó mucho en la producción de Jóvenes y Brujas para orientar como debían hacerse las cosas. También trabajó directamente con las actrices de la película para que actuaran como verdaderas brujas. Las aconsejó durante todo el rodaje y muchas de las escenas son sacadas de verdaderos aquelarres de grupos Wiccanos.

3 – Ocurrieron cosas extrañas durante las escenas de los rituales

Como suele ocurrir en películas de tipo sobrenatural, los productores suelen promocionarlas diciendo que pasaron “cosas extrañas” durante el rodaje. Esta fórmula ya se había utilizado en otras películas, como por ejemplo “El Exorcista”. Sin embargo, todos los miembros del rodaje aseguraron que pasaron cosas inexplicables durante los rodajes con los rituales dirigidos por Pat Devin. En especial todos recordaban la escena del ritual en la playa. Fairuza Balk había escuchado por sus conocimientos en brujería, que las playas no son el mejor lugar para hacer ritos paganos. Por algún motivo hacer ese tipo de cosas al lado del mar “ofendía” a las fuerzas de la naturaleza.

Las cosas no fueron bien grabando la escena del ritual en la playa. Para empezar, Fairuza Balk se puso enferma el día anterior y rodó en un estado lamentable. Aun así, hizo las escenas lo mejor que pudo. Aparte de eso empezaron a ocurrir otras cosas, como luces fundiéndose sin motivo. Incluso el altar que habían montado fue llevado por las olas y tuvieron que volver a ponerlo todo de nuevo. 

Lo raro fue que todo esto pasó después de haber hecho el ritual, el cual había sido realizado siguiendo las instrucciones de la “bruja” Pat Devin. La marea subió de un modo antinatural y luego bajó de nuevo según los testigos. Todo esto causó un verdadero malestar entre el reparto y los miembros de rodaje. Las supersticiones se apoderaron de la gente, aunque algunas de las personas que estaban presentes dijeron que había una explicación lógica a lo ocurrido.

4 – Las serpientes y bichos eran reales

Una de las escenas que más se recuerdan es la escena con serpientes y bichos de todo tipo. Todo era real menos una enorme cucaracha que se le puso a la cara de Fairuza Balk. Para hacer la escena se cerró herméticamente la casa donde se estaba rodando y se esparcieron todos los bichos. No solo había serpientes, sino también se pusieron ratas en la casa. Por motivos sanitarios, se aseguraron bien de que nada se escapara de la casa durante el rodaje.

5 – Algunas curiosidades de la actriz Robin Tunney

Aunque había varias brujas en la película, la actriz Robin Tunney encarnando a Sarah era la principal. Sin embargo, cuando hizo el casting para hacer la película casi la descartan. Apareció para hacer la prueba completamente calva, ya que había hecho poco antes la película “Debra” y se tenía que afeitar la cabeza. Cuando el director Andy Fleming la vio se quedó espantado.

Aun así, Fleming le dio una oportunidad porque venía con buenas referencias. Para hacer la prueba le dio una peluca que tenían a mano para que lo hiciera con pelo largo. Con la peluca puesta fue algo diferente y Fleming quedó impresionado con la actuación. Finalmente le dio el papel, aunque no empezó a rodar hasta que le volvió a crecer el pelo.

Otra curiosidad de Robin Tunney es que era muy buena simulando llorar. En todas las escenas donde llora y le caen las lágrimas, no tuvieron que simularlo. Solo necesitaba un par de minutos para concentrarse y las lágrimas surgían de forma automática.

Tanto Tunney como las demás actrices no eran ni mucho menos unas adolescentes. Todas tenían más de 20 años, aunque en la película tenían que pasar por estudiantes. Incluso el actor masculino Skeet Ulrich ya rondaba los 30 años cuando hizo el papel de Chris.

6 – Los trucos de en las escenas de magia eran simples

Andy Fleming dijo en varias entrevistas que la película Jóvenes y Brujas se hicieron con un presupuesto muy ajustado. Por esto tuvieron que mirar mucho los gastos para muchas de las cosas. Por ejemplo, los efectos especiales se intentaron hacer de los modos más simples posibles. Un ejemplo era la escena del lápiz que se sostiene solo y da vueltas.

Lo hicieron manteniendo el lápiz de pie con un alambre, y debajo de la mesa había una persona girándolo de forma manual. En otra escena donde la actriz Rachel True levitaba durante un ritual, se usó una pequeña grúa hidráulica para hacer que flotase. Muchos otros trucos se hicieron de forma similar y así ahorraron mucho dinero en complicados efectos especiales.