Roberto el muñeco (Robert the doll) puede que no te diga nada, pero para muchos es el muñeco diabólico más horrible que ha existido jamás. Es un niño pequeño vestido de marinero con una cara que asustaría a cualquiera. Mucha gente cree que este muñeco es capaz de provocar accidentes de coche, daños a otras personas, hacer perder empleos y provocar divorcios y otras muchas cosas. Puede que te estés preguntando que algo así no puede existir, y lo cierto es que si. Este muñeco tiene más de cien años y se encuentra en el museo Martello en Florida. Antes de estar en este museo, perteneció a un artista llamado Robert Eugene Otto, el cual era un artista y miembro de una acaudalada familia. Te contamos algunas cosas de este supuesto muñeco diabólico, que de alguna manera recuerda a la muñeca Annabelle.
Como se puede ver, el muñeco y el duelo tenían el mismo nombre. El muñeco fue un regalo del abuelo del artista, el cual lo compró en un viaje a Alemania. Curiosamente, la relación entre el artista y su muñeco Robert continuó en su edad adulta, y muchos dicen que la relación era de alguna manera insana. Lo llevaba a todos lados, le hablar en primera persona como si fuera real.
El propio museo indagó en el origen del muñeco Robert lo cual le llevó a un fabricante de juguetes llamado Steiff. Esta misma compañía tiene entre sus productos juguetes muy conocidos y populares en todo el mundo. Lo cierto es que este modelo de muñeco no se pensó en vender como un juguete, sino como parte de espectáculos hechos por payasos o bufones en circos. El traje de marinero no venía de fábrica, por lo que se piensa podría ser un traje que Otto se ponía cuando el mismo era un niño. Lo cierto es que cosas extrañas pasaban entre el dueño y el muñeco, y pasó casi desde el principio.
Historia de Robert the Doll – el Muñeco Diabólico
Para empezar, el joven Otto empezó a culpar al muñeco de muchas travesuras que se hacían en la casa. Mientras que esto se puede pensar como cosas de niños, otras personas empezaron a notar ciertos detalles curiosos al crecer Otto. Ya siendo adulto, Otto vivía en una casa llamada “la casa del artista”, donde se podía el muñeco en la ventana de la casa, pero otras simplemente desaparecía. Esto ocurría cuando no había nadie en la casa en teoría. Varias cuidadoras de la casa juraron oír pasos en el ático y risas cuando la cosas estaba sola. También se decía que la expresión del muñeco cambiaba cuando alguien hablaba fuera de tono a Otto.
Después de 20 años de este tipo de sucesos extraños, Robert el muñeco acabó finalmente en el museo. Esto fue realmente lo que hizo lo hizo famoso. Ha estado en programas de televisión, se le ha llevado de gira en espectáculos de terror, se han escrito libros sobre el y además unas cuantas películas.
Según el encargado del museo, el muñeco sigue recibiendo de una a tres cartas diarias, pero no son de admiradores sino de gente que le pide disculpas. Muchos visitantes del museo atribuyen su mala suerte al haber faltado el respecto al muñeco de alguna manera u ofendiéndole en la visita. Otras cartas le piden consejo o ayuda para dañar a personas que les cae mal. Todas las cartas de guardan y ordenan por fecha. También recibe correos electrónicos y muchos le mandan caramelos y toda clase de chucherías. Hay que decir que los empleados del museo no comen ninguna de estas golosinas.
La actualidad del Robert el muñeco
Los cuidadores de Robert le hacen un mantenimiento una vez al año, sacándole de su recipiente y pesándolo para saber si la humedad de Florida afecta a su cuerpo relleno de paja. También leen todos los correos que recibe y mantiene las páginas en redes sociales para Robert. De hecho, algunas veces responden a los correos en nombre del muñeco. Una de las preguntas que hacen a los empleados del museo es si creen que realmente Robert el muñeco tiene algún tipo de maldición. La respuesta es siempre que no lo saben.
Lo cierto es que nadie del museo ha tenido ningún problema o una mala experiencia. Tampoco se han sentido incómodos con el, por lo que se lo toman como un trabajo más. De hecho, toda esta parafernalia alrededor de Robert les ayuda a mantener su empleo.