Hay ciertas películas que aunque no son demasiado conocidas, son películas de culto entre una legión de fanáticos del cine. Una de estas películas es Están Vivos del increíble John Carpenter. A mediados de los ochenta Carpenter leyó un cómic que hablaba de alienígenas que controlaban en secreto a la raza humana. De alguna manera asoció esto a los dirigentes que nos gobiernan y la manera en que lo hacen.
Finalmente Carpenter decidió llevar el cómic a la pantalla grande con el nombre de Están Vivos. El argumento giraba alrededor de un hombre corriente que descubre que puede ver a los alienígenas mediante unas gafas especiales. Para el papel principal eligió a la estrella de la lucha libre “Rowdy” Roddy Piper. El resultado fue un pequeño film que todavía es recordado como icónico en el cine de ciencia ficción.
Te contamos algunas cosas interesantes de esta película de culto llamada Están Vivos.
Indice de Contenidos
1 – Los orígenes de Están Vivos
Están Vivos es una adaptación de la novela corta “Ocho en Punto de la mañana” de Ray Nelson. Esta novela se escribió en los años sesenta, pero Carpenter realmente se inspiró de una adaptación en cómic de la novela publicada en Eclipse Comics durante los ochenta. El director se quedó prendado de inmediato con la idea de alienígenas esclavizando a la raza humana.
La historia explicaba como la raza humana había sido hipnotizada y controlada por una raza de otro mundo. En la novela el protagonista tiene hasta las ocho de la mañana para salvar a la humanidad, y de ahí el título.
Carpenter hizo la película Están Vivos sin cambiar apenas nada de la novela y el cómic, aunque el tema del hipnotismo no le convencía. En lugar de ello lo cambió por mensajes subliminales que podemos ver a lo largo del film.
2 – Carpenter hizo la película con Ronald Reagan en mente
Cuando Están Vivos fue rodada, se vivía lo que la gente llamaba “era Reagan”, donde Carpenter se fijó en como se desarrollaba ese periodo. Veía mucho la televisión y tenía la sensación de que continuamente le querían “vender algo” para convencerle de muchas cosas que estaban pasando. Vio una gran manipulación en los medios y era tan descarado que quiso reflejarlo en su película.
Según dijo Carpenter, la mejor manera que se le ocurrió fue representar a los republicanos como alienígenas. Aunque en este caso le tocó a Ronald Reagan y su gobierno ser los “malos” de la película, Carpenter siempre dijo a través de los años que hay élites que nos gobiernas y tienen el poder, independientemente que sean de izquierdas o derechas. Esto lo sigue creyendo hasta el día de hoy y asegura que es una incómoda realidad.
3 – La elección del papel protagonista
Como se ha dicho, Carpenter eligió al profesional de lucha libre Roddy Piper para hacer su película. Esto puede parecer algo extraño, pero Carpenter quería encontrar a una persona que representara la clase trabajadora de un modo creíble. Como también era un fan de la lucha libre, pensó en contratar a un luchador en lugar de un actor conocido.
Uno de los luchadores que admiraba era Roddy Piper y el manager del luchador fue el encargado de que se conocieran. Piper no conocía a Carpenter de nada antes de presentarse, y de hecho ni siquiera sabía que era un director de cine. El manager y Roddy Piper se encontraron con John Carpenter y se fueron a comer. Durante la comida Carpenter le dijo a Piper si le gustaría hacer una película. La estrella de la lucha libre aceptó sin dudarlo.
Según dijo Carpenter, nada más ver a Piper cuando se encontraron, supo que era el personaje perfecto. Su aspecto rudo con algunas cicatrices le alejaban de lo que era un actor común. Era lo que andaba buscando.
4 – Los gastos adicionales de la película
La película Están Vivos tuvo un presupuesto muy normalito, aunque Carpenter era bastante bueno en hacer películas sin demasiado dinero. Aun así, consiguió cuatro millones de dólares para hacer su película. Este presupuesto en cualquier película de Hollywood es ridículo, pero Carpenter tenía suficiente para lo que tenía en mente.
Para que el dinero les diera para todo, tuvieron que hacer las cosas pensando mucho en como hacer las cosas. Por ejemplo, los efectos especiales podían comerse buena parte del presupuesto, por lo que lo hicieron con métodos de la vieja escuela. Todas las señales y carteles que se pueden ver cuando los protagonistas se ponen las gafas, están hechas de folios pintados usando la técnica del mate.
La técnica del mate se usaba en las películas antiguas para recrear paisajes y escenarios de fondo. Carpenter recuperó estas técnicas antiguas en su película y se ahorró un montón de dinero en efectos especiales. La alternativa hubiera sido colgar carteles por todos lados con estos mensajes subliminales. El único sitio donde no pudieron usar esta técnica fue en la escena del supermercado, donde tuvieron que usar carteles de verdad.
También se ahorraron bastante en decoraciones y atrezzos usados en el film, ya que los aprovecharon de otras películas. Algunas cosas que podemos ver en Están Vivos fueron cogidas de películas como “Los Cazafantasmas” y “Golpe en la pequeña China”, esta última también de Carpenter.
5 – La escena de la lucha duró
Una de las escenas más famosas es la de la escena de lucha libre entre Roddy Piper y el también luchador Keith David. Dura más de cinco minutos y le dieron vía libre a los actores – luchadores para que hicieran lo que quisieran. Según dijo Carpenter, la escena de la pelea tenía el guión en blanco. Esto significaba que podía hacer lo que quisieran en esa escena, ya que eran luchadores profesionales de lucha libre.
Lo cierto es que la pelea no fue improvisada ya que ambos luchadores estuvieron un mes ensayando la coreografía. Cada escena fue ensayada al milímetro y no dejaron nada a la improvisación. Carpenter grabó la escena entera de lo que habían practicado ambos actores y la dejó tal cual en su película. No quiso borrar nada de la lucha porque había quedado muy bien según el director.
6 – En realidad solo hay un alienígena
En Están Vivos se pueden ver unos cuantos alienígenas con su aterrador aspecto, pero lo cierto es que todos eran el mismo actor. Se trataba de Jeff Imada, el cual era también el coordinador del grupo de especialistas en el film. Al principio Carpenter había contratado a varios actores para que hicieran de extraterrestres, pero no quedó muy satisfecho con los resultados. Finalmente le pidió a Jeff Imada que doblar a todos los alienígenas para el rodaje.
No todos los alienígenas que aparecen en Están Vivos son Jeff Imada, ya que se dejaron grabaciones con otros extras. Sin embargo, la mayoría son la misma persona lo cual es algo que la mayoría no sabe.