¿Quién no conoce a Ludwig van Beethoven? ¿Te gustaría saber algunas curiosidades de Beethoven? Ya hablamos hace un tiempo del famoso duelo de piano que hicieron Beethoven y Daniel Steibelt, y es que este músico tenía un gran número de genialidades. Todo el mundo le recuerda como uno de los compositores más grandes de todos los tiempos, pero también fue un pianista fuera de serie.
La mayoría de la gente no sabe mucho de Beethoven, aparte de que fue un gran músico. Los que hayan leído o visto alguna película o serie sobre este compositor, sabrán un poco más de cómo fue su vida. Sin embargo, para muchos Beethoven sigue siendo un misterio como personas. Es algo curioso cuando la mayor parte de occidente reconoce su 5º sinfonía nada más escucharla.
Beethoven nación en 1770 en Bonn, Alemania dentro de una familia que estaba formada en su mayoría por músicos. Esto siempre es una ventaja para los oídos de un niño que absorbe todos los sonidos. No es de extrañar que en poco tiempo se convirtiera en un virtuoso pianista que dio brillantes interpretaciones en su juventud. Como muchos sabrán, a partir de los 30 años empezó a perder el oído. Esto le afectó mucho pero no le impidió escribir algunas de las piezas musicales más conocidas de la historia.
Te contamos algunas curiosidades de Beethoven que seguro que resultarán interesantes.
Indice de Contenidos
1 – Cosas menos conocidas de la infancia de Beethoven
Como se ha dicho, la historia de Beethoven comienza en una familia bastante involucrada con la música. Su padre se dio cuenta muy pronto de las dotes musicales de su hijo Ludwig y quiso potenciar ese talento. Como siempre se hacía en esos tiempos, el procedimiento era estudiar y practicar durante horas interminables. Eran sesiones interminables tanto de día como de noche, donde el joven Beethoven tenía que subirse a una butaca para llegar al teclado del piano.
Beethoven también combinada sus estudios de música con las asignaturas normales. Se puede decir que pasó toda su niñez en la escuela y su carrera musical, quedando poco tiempo para jugar. Según esta documentado, lo peor que se le daba eran las matemáticas. Incluso al acabar los estudios era incapaz de hacer ciertas operaciones como multiplicar y dividir.
Aunque no jugaba mucho por falta de tiempo, aprovechaba en la escuela para soñar despierto. Mucha gente pudo notar esto, donde Beethoven simplemente “viajaba” a otro mundo y se desconectaba del todo. Por supuesto, es sus estudios y prácticas musicales su padre le obligaba a estar concentrado.
2 – Las primeras actuaciones
Desde muy joven Beethoven comenzó a realizar conciertos para audiencias de diferente tamaño. Al ser un virtuoso del piano se dio a conocer muy pronto y fue ganando fama entre los grandes músicos del momento. De hecho, con 17 años tocó el piano con una personas llamada Wolfang Amadeus Mozart entre el público.
Cuando Beethoven tocó frente al legendario compositor, Mozart ya era muy conocido en Viena. Ocurrió algo que fue muy curioso, y dejó claro que Mozart sabía distinguir el talento en cuanto lo veía. Mozart era muy crítico con los músicos de la época y no solía hablar demasiado bien de ellos. Al ser un genio por encima de su tiempo, le aburría la música que se hacía entre sus contemporáneos.
Cuando Beethoven tocó estando Mozart entre la audiencia, al acabar la interpretación Mozart dijo lo siguiente: “Estad atentos a este joven, porque algún día dará al mundo cosas de las que hablar”.
Una de las cosas sorprendentes de Beethoven era su capacidad de improvisación. Muchos de los pianistas y músicos conocidos de la época notaban esto. Beethoven podría hacer arreglos de una pieza cualquier en el momento y mientras la interpretaba. En la música clásica hay poco espacio para la improvisación, pero Beethoven siempre jugaba mucho con este concepto.
3 – La relación con Joseph Haydn
De joven no solo estuvo estudiando bajo la tutela de su padre, sino que fue alumno del famoso Joseph Haydn. Fue estando en Viena, y tener como profesor a este famoso compositor no fue del todo bien. La forma de ser de Beethoven siempre fue compleja y hacía las cosas siempre a su manera. Haydn era muy estricto con la disciplina, lo cual no era el lado fuerte de Beethoven.
Al final tanto Beethoven como Haydn decidieron dejar esta relación de profesor y alumno. De hecho, según se dijo al final no se llevaban demasiado bien. El fuerte carácter de Beethoven le dio problemas personales a lo largo de su vida.
4 – La salud no le acompañó durante su vida
Lo que mucha gente no sabe es que Beethoven nunca tuvo una salud muy buena. Desde muy joven siempre estaba con problemas de todo tipo. Según se iba haciendo adulto la cosa no mejoró y fue a peor. Está documentado que el músico sufrió de problemas estomacales, periodos de colitis, tifus, infecciones y problemas en la piel. Todo esto siendo relativamente joven.
Al final de su vida los problemas de salud se acentuaron. Tuvo inflamación de las arterias y problemas hepáticos que acabaron en cirrosis. Por si fuera poco se quedó sordo, lo cual fue lo que más le impactó tanto física como mentalmente.
Beethoven siempre dijo que su sordera fue por una caída que tuvo siendo pequeño. Parece ser que le asustaron y cayó al suelo dándose un golpe en la cabeza. Sin embargo, los expertos piensan que pudo ser consecuencia del tifus que tuvo de pequeño o del sarampión. Hay que recordar que la medicina no estaba tan adelantada como ahora. Antes de cumplir los 30 ya empezaron las molestias en sus oídos, lo cual fue progresivo.
5 – Curiosidades de Beethoven con los pianos
Otras de las anécdotas de Beethoven que muchos no saben es que fue un pionero en las composiciones en el piano. La mayoría de los músicos hasta el momento hacían sus composiciones en el clavecín. Sin embargo, Beethoven decidió que todo lo haría en el instrumento que tanto amaba, que era el piano. Por ello, todas sus composiciones se hacían al piano en lugar de usar un clavecín. Se puede decir que fue de los primeros en hacerlo.
Otra de las curiosidades de Beethoven con respecto al piano, es que odiaba dar clases. Era algo que le ponía de muy mal humor, aunque hacía excepciones. Según se dice, solo daba clases de piano a estudiantes que realmente tuvieron un talento excepcional. También hacía excepciones con chicas jóvenes que eran muy atractivas. Lo cierto es que era una de sus fuentes de ingresos.
6 – Era un admirador de Napoleón
El compositor era un admirador de Napoleón Bonaparte, sobre todo en su primera etapa. Beethoven lo veía como un personaje que luchaba en contra de muchas de las injusticias que se hacían en Europa. Fue tal su devoción, que escribió para Napoleón su tercera sinfonía llamada Eroica. Incluso estaba pensando en ir a vivir a París mientras componía esta sinfonía.
Sin embargo, el hecho de que Napoleón se autonombrara Emperador no le sentó bien a Beethoven. Esto cambió su forma de pensar sobre Napoleón, aunque la 3º sinfonía quedó como una de sus obras más conocidas.
No se fue a París, y siguió trabajado en Viena como había hecho siempre. De hecho, Beethoven siguió trabajando hasta prácticamente el día de su muerte. A diferencia de lo que muchos pueden pensar, la música no hizo rico a Beethoven y tuvo que trabajar para vivir hasta el final. Daba lecciones de piano, escribía música a petición de gente noble y rica, y por supuesto seguía componiendo su música.
7 – La muerte de Beethoven
Ludwig Van Beethoven murió en 1827, y la causa es muy debatida. Como se ha dicho antes, arrastraba varias enfermedades que habían deteriorado mucho su salud. Muchos piensan que pudo morir a causa de su cirrosis o alguna infección paralela. Se habla mucho de que pudiera haber contraído la sífilis o por envenenamiento por plomo, el cual se utilizaba en muchas cosas en aquellos tiempos.
El funeral de Beethoven fue visitado por miles de personas, lo cual deja claro que era seguido y respetado por mucha gente. Le despidieron todo tipo de artistas e incluso ciudadanos normales que no tenían que ver con la música.