El cristianismo en la antigua roma fue una de las épocas más duras para los seguidores de esta religión. Hoy en día sigue habiendo sitios donde los cristianos son perseguidos y son objeto de violencia, pero en la antigua Roma era una sentencia de muerte.
El antiguo Imperio Romano es una de las épocas que más atrae a los historiadores y todo el mundo en general. Se puede decir que incluso supera la pasión suscitada por la antigua Grecia, que fue anterior a la romana. No es de extrañar que todo el mundo sienta una especial atracción por los antiguos romanos, ya que nos dieron una gran cantidad de cosas que seguimos utilizando hoy en día
. Algunos ejemplos son los sistemas de alcantarillado, los sistemas de distribución de agua, el cemento, el jabón, las calzadas para la circulación de vehículos, etc.
Sin embargo, la antigua Roma también tiene una parte más oscura. Algunas de sus costumbres habituales no eran demasiado agradables, y los sangrientos juegos que celebraban no estarían bien vistos en la actualidad. Tener a gladiadores peleando hasta la muerte no sería aceptado hoy en día, aunque tenemos otras variantes menos violentas y sin que tenga que morir nadie. Sin embargo, cuando se trata del cristianismo los romanos se volvían especialmente violentos y represores.
¿Cómo fue el cristianismo en la antigua roma antes de que el emperador Constantino aceptara la iglesia cristiana?
Indice de Contenidos
1 – El duro trabajo en las minas
La persecución de los cristianos en la antigua Roma no siempre acababa en una sentencia de muerte. De hecho, muchas veces su destino era trabajar para el imperio. Uno de estos trabajos era en las minas romanas, lo cual puede parecer mejor que ser echado a las fieras, quemado vivo o crucificado.
El problema era que ser sentenciado a trabajar en las minas era realmente una forma de ser ejecutado. No era rápido pero pocos salían vivos de las minas.
Las condiciones en las minas romanas eran muy duras, y de hecho era uno de los peores castigos a los que alguien podía ser condenado. Hay muchos registros que hablaban de las condenas a trabajar a las minas, como sentencias de muerte muy lentas y con un gran sufrimiento. Aunque pueda parecer curioso, en la época romana se consideraba la crucifixión más humana que ser condenado a las minas.
2 – Los cristianos y el odio a la humanidad
¿De qué se les acusaba a los cristianos en la antigua Roma? Lo cierto es que se les culpó de muchas cosas, pero una de las más usadas fue algo llamado “odio humani generis”. Básicamente significaba odio a toda la raza humana, y por eso tenía que ser castigado de la manera más dura posible. Lo cierto es que la creencia de que los cristianos odiaban la humanidad estaba muy extendida y lo creía todo el mundo.
Los cristianos no querían saber nada de la vida social y normas de la sociedad romana, porque la veían pagana. Esto era una gran ofensa para los romanos, y a su vez veían la religión cristiana como algo pagano también. De hecho, los romanos también acusaban a los cristianos de otros crímenes graves como era el asesinato e incesto.
Incluso se les acusó de practicar el canibalismo, como veremos en la siguiente sección. Todo esto unido a una gran antipatía general, hizo que la persecución cristiana se prolongara durante mucho tiempo.
3 – Los cristianos y la acusación de canibalismo
El cristianismo en la antigua roma llegó a puntos de locura que ahora no se comprenderían. Como se ha dicho antes, los romanos pensaban que los cristianos eran una especie de demonios, y por tanto las reacciones eran muy hostiles. Hay que recordar que el cristianismo era relativamente nuevo y muy diferente a la cultura y creencias romanas. Puede que una de las ideas más curiosas que tenían los romanos, era que los cristianos practicaban el canibalismo.
El malentendido posiblemente llegó por el ritual que hablaba de “comer la carne y beber la sangre de Cristo”. Es lo que llamamos el ritual de la eucaristía, y los romanos lo entendieron literalmente.
El ritual de la eucaristía dañó mucho la imagen de iglesia cristiana en la antigua Roma. Esta creencia equivocada corrió por toda la sociedad romana, principalmente gracias al boca a boca y los rumores. Al mismo tiempo, los cristianos también acusaban a los romanos de canibalismo.
Era porque los romanos quemaban a los prisioneros en la hoguera, lo cual para los cristianos era como “cocinarlos”. Otro motivo era porque la gente bebía la sangre de los gladiadores como remedios para algunas enfermedades.
4 – Los cristianos y el ejército romano
Como se ha dicho, los cristianos no estaban por la labor de integrarse en la vida romana, y una de las cosas que peor sentó fue con el ejército romano. Los cristianos se negaban en rotunda ser parte del ejército romano, lo cual era obligatorio.
En la cultura romana, el pasar por el ejército era algo escrito en fuego y era inseparable de la religión u otras actividades sociales. Los cristianos comenzaron a pedir a los soldados cristianos que abandonaran el ejército romano, lo cual no sentó muy bien.
El ejército romano tenía una guerra particular con los cristianos ya que se oponían a luchar o colaborar como soldados. Las fuerzas romanas solían estar en continuas luchas para expandir el imperio, defender sus fronteras y mantener el orden en las tierras conquistadas.
El negarse a ser soldado o luchar por el Imperio Romano era una gran ofensa y una traición. Por este motivo, eran bastante duros a la hora de “dar una lección” a los cristianos que no querían participar en una batalla o alistarse.
5 – La cristiandad y los tatuajes
Ahora están muy de moda los tatuajes, aunque siempre han estado ahí de alguna manera. Sin embargo, los cristianos estaban en contra de los tatuajes porque un pasaje de la Biblia mencionaba que no se debía mancillar el cuerpo de esta manera. Eso se puede leer en el segmento de Levítico 19:28:
“No se hagan heridas en el cuerpo por causa de un muerto. No se hagan ninguna clase de tatuaje. Yo soy el Señor”
Sin embargo, en Roma si se utilizaban los tatuajes de manera habitual, pero eran destinados solo para los esclavos y los criminales. Los propios romanos veían los tatuajes como algo destinado a gente de un bajo nivel social.
Cuando el emperador Constantino hizo cambios en el imperio y aceptó la cristiandad, prohibió los tatuajes tal como decían las escrituras cristianas. Una de las cosas consideradas un delito grave, era hacerse tatuajes en la cara. Se pensaba que el rostro estaba hecho a semejanza de Dios, por lo que no podía ser mancillado.
Este cambio en las leyes hizo que los tatuajes empezaran a desaparecer. Ni siquiera los criminales y los esclavos podían tener tatuajes, y se dieron por desaparecidos durante mucho tiempo.
6 – El ateismo como delito cristiano
Otra de las acusaciones más curiosas que recibieron los cristianos fue la de ser ateos. Como se ha contado, los acusaron de asesinos, realizar prácticas incestuosas y ser caníbales. Pero también estaba la creencia de que eran ateos al no creer en los dioses romanos que había establecidos.
Esto era muy grave y se consideraba un delito de traición. Los cristianos renegaban de todos los dioses romanos y no respetaban las muchas estatuas que había en Roma representando a estos dioses.
Aunque los cristianos no creían en deidades romanas, creían en un solo dios. Esto hacía que realmente no fueran ateos, pero para los romanos si lo eran sin ninguna duda. Por este motivo también fueron perseguidos y ajusticiados de diferentes formas. Una de las peculiaridades de esta persecución, es que el cristianismo en la antigua roma tuvo sus primeros mártires gracias a las acusaciones de ateismo.