Los japoneses saben bien qué son los tifones y sus consecuencias, ya que es una zona proclive a sufrir este tipo de eventos.
Es por ello que Atsushi Shimizu, el ingeniero encargado de desarrollar el proyecto de los aerogeneradores, ha diseñado una turbina capaz de aprovechar los vientos de los tifones, los cuales pueden llegar a alcanzar los 160 kilómetros por hora.
Se estima que un solo tifón genera energía equivalente a 50 años de electricidad
El proyecto, que lleva ya unos cinco años gestándose, tendrá que sobrellevar entre otras cosas, las cambiantes condiciones climáticas, la accidentada orografía nipona y la imposibilidad de la red eléctrica actual de soportar tal cantidad de energía, y mucho menos almacenarla correctamente.
De hacerse realidad lo anterior, ayudaría a sofocar los cortes de energía que ocurren en Japón tras el paso de tifones, que dejan a casi todo el país sin suministro eléctrico.
Una alternativa viable tras apagarse su central nuclear
La central nuclear de Fukushima, que tuvo que ser clausurada debido a un fallo en sus instalaciones debidas al tsunami de 2011, que arrasó la costa de Japón.
Desde entonces, han buscado varias alternativas, y para que estos aerogeneradores, que ya han sido probados en la pequeña isla de Okinawa, son capaces de generar 1KW de electricidad con pequeños vientos de 36 kilómetros por hora.
La novedad en este diseño japonés, respecto a los molinos de viento es que gira respecto del eje horizontal en lugar de utilizar las típicas aspas, lo que permite aprovechar el impulso del viento y hacerlo más estable y resistente respecto a las hélices.
Dentro de poco, estos aerogeneradores pasarán una difícil prueba con los tifones que asolan Japón en Octubre, pasando el viento a más de 200 kilómetros por hora, buscando que dichos aparatos puedan seguir generando electricidad sin necesidad de repararlos.
Intentando pasarse a las renovables en 2030
Debido a las complicaciones que traen las instalaciones nucleares sumadas a la fuerte actividad sísmica del archipiélago, el gobierno japonés ha puesto en marcha un plan para que el 15% de la energía generada por el país sea de fuentes renovables. Sin embargo, la realidad choca con procedimientos que obstaculizan su implantación, además del presupuesto de 1.900 millones necesarios para su construcción a nivel nacional.
Lo anterior puede verse reflejado en que el uso de la energía eólica es tan solo el 0.5% del total de renovables, chocando con otros países como España, Alemania, China, Estados Unidos o la India, en donde la energía eólica es una de las principales fuentes de energía limpia.
Las aspiraciones de Miyazaki, portavoz de Challenergy, van mucho más allá, buscando aprovechar la veintena de tifones que visitan Japón cada año y convertir la energía eólica no en electricidad, sino en hidrogeno, creando la turbina de aire más grande del planeta, solventando así el elevado coste que supone generar hidrogeno, presente en la naturaleza pero que no puede “extraerse”.