¿Recuerdas el desastre de Chernobyl, del cual ya hemos hablado anteriormente en este blog? Es considerado hoy en día como el accidente nuclear más terrible de la historia. Por este motivo varias décadas después sigue habiendo una zona de exclusión donde la gente entra bajo su cuenta y riesgo (si es que le permiten entrar).
Sin embargo, a pesar de los niveles de radiación sigue existiendo mucha vida en el área de Chernobyl. De hecho, el abandono de la población ha hecho que la vida animal haya crecido de una forma increíble. Chernobyl Se ha convertido en un refugio natural para ciervos, lobos, perros, linces, caballos, pájaros e incluso osos. La pregunta que muchos se hacen es ¿Cómo les está afectando la radioactividad?
El accidente nuclear ocurrió al lado de la ciudad ucraniana de Pripyat a mediados de los ochenta. La explosión y rotura de un reactor nuclear dejó contaminada un perímetro de unos 50 kilómetros. Sin embargo, el área de exclusión se amplío mucho más llegando a los 1500 kilómetros cuadrados. Esto lo ha convertido en enrome santuario para la vida salvaje.
Indice de Contenidos
Los perros callejeros en Chernobyl
La fauna animal en Chernobyl es muy extensa, pero a algunos animales les ha ido mejor en la zona de exclusión. Es el caso de los perros callejeros, los cuales son herederos directos de las mascotas que fueron abandonadas años atrás. Los perros callejeros han tenido una ventaja sobre los otros animales de la zona.
La zona de exclusión es frecuentemente visitada por operativos del gobierno para hacer trabajos puntuales. Estos trabajadores durante años han compartido sus almuerzos y alimentos con los perros que existen en la zona prohibida. Esto ha hecho que se haya vuelto el grupo principal de animales más numeroso en Chernobyl.
Sin embargo, no todo es tan bonito. La mortandad entre los perros callejeros es muy alta, y no es por culpa de la radioactividad. Los inviernos de Ucrania son muy duros y los perros no suelen vivir más de cuatro años. Sin embargo, su población canina sigue creciendo gracias a sus grandes camadas en época de crianza.
Los trabajadores y visitantes (incluso turistas) que visitan Chernobyl, tienen totalmente prohibido tocar a los perros. El pelo de estos animales puede contener partículas radioactivas peligrosas. Aun así, hay planes en marcha para intentar descontaminarles y buscarles hogares fuera de la zona de exclusión.
El paraíso de los grandes mamíferos
Aunque pueda sonar extraño, el desastre de Chernobyl ha sido una bendición para muchos animales en el área. Un ejemplo ha sido una raza de caballos llamados Przewalski, los cuales han crecido en número de una forma increíble. Esta raza es más comúnmente conocida como caballos salvajes de Mongolia, y ahora pueblan extensos territorios de la zona de exclusión.
En la zona excluida de Belarús también se ha podido ver el crecimiento de muchas especies. Se pueden encontrar renos, alces y grandes manadas de lobos, lo cual lo convierte en un curioso parque nacional de especies protegidas y en aumento. De hecho, los biólogos han visto que la densidad de población en Chernobyl ha crecido más que en el famoso parque de Yellowstone.
Otra cosa que han podido ver los científicos, es que los lobos no siempre están expuestos a la radioactividad. Debido a su naturaleza migratoria, suelen salir de la zona de exclusión durante largas temporadas. Esto les aleja durante ciertos periodos de la radiación.
La radiación y los animales de Chernobyl
Ya sabemos que la fauna animal está creciendo en esta zona declarada muy peligrosa, pero ¿Cómo afecta realmente la radioactividad a los Chernobyl? Parece que el hecho de que sean cada vez más numerosos y vivan bien, significa que la radioactividad no les afecta.
Hay muchos debates sobre la relación entre el incremento de la vida salvaje y la supuesta peligrosidad de la radiación. De hecho, la pregunta que se hacen muchos científicos es ¿Es más dañina la radiación o la presencia humana? Lo cierto es que algunos estudios piensan que quizá los niveles de radiación que hay en la zona no son tan mortíferos como siempre se ha pensado.
Otros científicos piensan que el motivo de que la radioactividad no esté causando estragos en la población animal es por las migraciones. Muchos animales no se quedan en un mismo sitio mucho tiempo. De la misma forma que ocurre con los lobos, los animales se mueven de un sitio a otro con mucha frecuencia. Esto significa que no están siempre expuestos a la contaminación.
Por supuesto que la radiación provoca la muerte de muchos animales. Sin embargo, hay más nacimientos que muertes y por eso la vida crece tanto en la zona de exclusión. De lo que los científicos están más preocupados es de si hay mutaciones en los animales. De momento no han detectado ninguna, pero muchos biólogos hacen constantes estudios por si esto ocurriera.
Conclusión
Posiblemente ya sepas existen visitas guiadas a Chernobyl, lo cual es otro modo de turismo de riesgo. Aparte de las precauciones que hay que tomar para prevenir contaminarse, también hay que tener cuidado con los animales salvajes. Está prohibido ir de noche a la zona de exclusión, ya no se puede garantizar la seguridad en caso de un ataque de perros salvajes, lobos, osos, etc.
Sin embargo, ir de día es relativamente seguro siempre que no se toque nada y no se vaya a ciertas zonas. Los animales de Chernobyl se han convertido en todo un fenómeno del que hablan biólogos, ecologistas y expertos en la fauna salvaje. Parece que el desastre del reactor nuclear también ha tenido sus puntos positivos.