Cuando la gente se jubila decide invertir en tiempo en diferentes cosas. Puede ser irse a la costa a un pueblo tranquilo, viajar, dedicarse a sus hobbies de toda la vida, etc. Lo que no es tan normal es dedicar la jubilación a buscar barcos naufragados. En la historia de hoy hablaremos de tres jubilados de Nueva York que quedan de vez en cuando para buscar naufragios en diferentes lugares. Parece que ahora han tenido suerte porque han encontrado en el lago Ontario un barco hundido del siglo 18. El barco empezó a navegar en 1798 llevando toda clase de mercancías por varios lagos del país. Sin embargo, en noviembre de 1803 naufragó en el lago Ontario.
Es uno de los barcos comerciales más antiguos de la zona que ha naufragado. Parece ser que se hundió haciendo un viaje desde Kingston a Niagara, pero se vieron en medio de una tormenta que causó el naufragio. Tanto la tripulación como los comerciantes que iban en el barco perecieron. Este grupo de jubilados usa tecnología moderna para poder encontrar naufragios, escaneando el fondo de los lagos con mucha paciencia. En este caso, detectado el barco en Junio. Mandaron un vehículo especial controlado remotamente para que sacara fotos de alta resolución.
Estos tres jubilados se componen de un arquitecto, un piloto de las fuerzas armadas y un ingeniero. También cuentan con la ayuda de un buceador experto en investigar naufragios llamado Jim Kennard. En su historial ha encontrado unos 200 naufragios desde los años setenta. Ahora es colaborador de los tres amigos cuando deciden juntarse y empezar una aventura de este tipo. No es una simple afición ya que los cuatro suelen reunirse hasta veinte veces por año. El descubrimiento de este navío en el lago Ontario ha sido uno de los más importantes para el grupo. De todos modos, estos naufragios no son tan extraños en el lago Ontario. Se calcula que ha habido unos seis mil a lo largo de la historia.
De momento nos han dejado este video, aunque no han dicho a nadie donde se encuentra el barco. Solo han dado la localización a unos cuantos arqueólogos para hacer las investigaciones. Una vez verificado lo que tiene el barco, lo dejarán en ese mismo sitio (suponemos que si hay un tesoro se lo llevarán).